....Lucifer....

Nombre: Lucifer
Raza: Príncipe de los demonios.
Edad: Aparenta unos 20 años humanos, pero en realidad su edad es indefinida.


Descripción psicológica:

Lucifer, como señor de los demonios, es el más fuerte y despiadado de ellos, ya que nadie le ha quitado el puesto hasta ahora, y no piensa dejar que lo hagan. Su carácter es tan variable como el viento, puede ser tremendamente indiferente o por el contrario cruel y despiadado sin reservas de ninguna clase. Nunca habla más de lo necesario, e interviene en contadas ocasiones, sólo cuando cree que conviene hacerlo. Cuando lo hace, sus decisiones son implacables y cumplidas al instante. No permite que nadie se salga de sus normas y castiga duramente al que se atreve a desobedecerle. A pesar de ello, Lucifer puede llegar a tener una mentalidad tan cambiante que puede desconcertar a cualquiera. Conoce la atracción que provoca en los demás y eso le lleva a utilizarla cuando lo cree necesario. No suele atender ante ruegos ni súplicas, la compasión no está en su naturaleza. Sus más fieles servidores son gratamente recompensados. En su interior esconde una brizna de amor decadente, muerta desde hace mucho tiempo.


Apariencia física:

El cuerpo que utiliza Lucifer para su forma humana es el de un joven alto y delgado, de cuerpo atlético, con el cabello de color castaño oscuro y sedoso. Sus ojos son de un color azul muy intenso, de tal forma que toda su atracción se refleja en ellos, así como su crueldad cuando así lo desea. En forma demoníaca el terror mismo aparece en sus ojos del color de las brasas ardientes, un par de alas inmensas y negras se extienden en su espalda, sin plumas, únicamente un halo en forma de alas. Toda la atracción que provoca esta reflejada en cada uno de sus movimientos y gestos, en cada una de sus palabras de su dulce y engañosa voz, y de sus irresistibles ojos celestes.


Historia:

Lucifer fue en su tiempo un ángel, ahora caído. Reina en las tinieblas desde el día en que cayó a ellas. Nadie es conocedor de su historia, y él comienza a olvidarla…